Hay un arrullo en mi piel que lleva tu nombre,
una silueta de luz que danza para mí.
Hay un abrazo escondido entre la maleza del mundo,
un susurro y un beso que agitados vienen a ti.
¡Y entre el frío del invierno vienes! Llegas y me tomas,
¡y mi cuerpo desvaría por ti!
¡Un minuto más! ¡Sólo mírame un minuto más!
Y antes de irte de nuevo, toma mi mano y siente el calor;
besa mis labios, y olvida el dolor;
guarda silencio...
y siente el amor.